Google se lució con la organización del Zeitgeist 2010 en Scottsdale, Arizona, incluidas atenciones y sorpresas que hicieron el deleite, como se decía antes, incluso de los más exigentes, entre los que no estoy yo. Eso sí, te cuento que me tuve que abstener de reportar e incluir en mi blog todo lo que escuché y aprendí en el Zeitgeist en éstos dos días, pues así lo solicitaron al inicio de la conferencia. Muy a mi sorpresa, se dio una petición que jamás habría esperado de una compañía como Google, sin embargo, luego lo pude comprender. Colocar el Zeitgeist tiene un costo altísimo, y la posibilidad de usar, monetizar o botar su material pertenece única y exclusivamente a Google.
Dicho esto, por supuesto, no descarto la posibilidad de compartir en los próximos días imágenes o instantes que reflejen la riqueza compartida en Scottsdale, Arizona, durante ésta conferencia centrada en el cambio mental que nos exigen los tiempos en los que vivimos. La reunión concentró 400 personas sentadas en un pequeño salón del Montelucía, totalmente blanco hasta en la alfrombra, de luces e iluminación teatral y 400 sillas Aeron de Herman Miller que me hicieron sentir como en en casa.
Además, dejo acá expresado también mi agradecimiento sincero y sentido por ésta invitación enorme. Google: muchísimas gracias. Mientras los canales de televisión acuden a modificar las condiciones que han tenido con las agencias por décadas, en medidas que parecen un tanto desesperadas, otras compañías en el negocio publicitario como Google se concentran en construir el futuro, influirlo o inspirarlo con iniciativas como el Zeitgeist, Lance Armstrong incluido.
